La voz popular suele decir que la justicia consiste en dar a cada uno lo suyo.
Pero esto es muy ambiguo, puede entenderse de varias maneras, según se entienda el “cada uno” y “lo suyo”:
- Dar a cada uno lo que tiene, o sea, protegerlo y devolverle lo que le sea quitado. Pero, ¿por qué es de cada uno lo que ya tiene? ¿Cómo lo consiguió? ¿Por qué debe seguir teniéndolo? Y ¿qué es lo que hay que devolver, cuando se recibe un mal? ¿Hay que dar mal por mal, o bien por mal?
- Dar a cada uno lo que se merece. Pero ¿qué merece cada uno?
- Dar a cada uno lo que le conviene o lo que necesita (y exigirle lo que pueda dar). Pero ¿qué necesita cada uno? ¿Lo que él cree que necesita? Y ¿por qué otros tienen que dar a uno lo que uno no es capaz de conseguir?
Hay algunas teorías que dicen de forma algo más precisa qué es lo justo:
A) La Justicia es la Fuerza.
Por naturaleza todo ser intenta conseguir el máximo poder sobre el medio para realizar sus propios deseos.
Lo justo es que el león más fuerte domine toda la manada y cubra a todas las hembras, que mate a la gacela, etc. Gracias a este sistema la naturaleza se va haciendo más selectiva y sobreviven los mejores.
Igualmente, entre los humanos es siempre la fuerza la que decide lo que debe considerarse justo. Los que dominan en cada momento imponen a los demás sus creencias y las leyes.
Es justo que EEUU tenga armas nucleares y no las tenga Irán sólo porque EEUU tiene la fuerza para decidirlo así. Es justo que unos ciudadanos tengan muchos más bienes que otros porque tienen más fuerza para conseguirlos y defenderlos. Y así con todo.
En fin, LO JUSTO ES LO QUE DECIDE EL MÁS FUERTE.
B) La justicia es un pacto.
Por naturaleza todos creemos que ES PEOR SUFRIR UN MAL QUE COMETERLO. Pero como
nadie tiene la fuerza suficiente para prevalecer sobre todos los demás, sino que está obligado, por naturaleza, a convivir y hasta a colaborar, si quiere sobrevivir y vivir mejor; y como, además, los beneficios que se sacarían de una sociedad sin leyes serían para todos inferiores a los perjuicios que se derivarían de dicha situación, todos creemos que es mejor respetar unas leyes, o sea, perder cierta libertad y sacrificar ciertos deseos, a cambio de seguridad y colaboración para conseguir otros mayores. Pero la justicia no es un fin en sí, sino un medio para nuestros deseos.
Platón rechaza ambas teorías, la de la fuerza y la del contrato. ¿Por qué? ¿Cuál es su propuesta?
Para pensar en ello, además de recordar cuál es su teoría de lo que es un hombre, intentemos
contestar a estas preguntas:
Supongamos que alguien tuviese un arma que le hiciese invulnerable y superpoderoso. ¿Respetaría este individuo las leyes? ¿Por qué?
¿Qué te parece peor, torturar tú a alguien o que alguien te torture?
Pero esto es muy ambiguo, puede entenderse de varias maneras, según se entienda el “cada uno” y “lo suyo”:
- Dar a cada uno lo que tiene, o sea, protegerlo y devolverle lo que le sea quitado. Pero, ¿por qué es de cada uno lo que ya tiene? ¿Cómo lo consiguió? ¿Por qué debe seguir teniéndolo? Y ¿qué es lo que hay que devolver, cuando se recibe un mal? ¿Hay que dar mal por mal, o bien por mal?
- Dar a cada uno lo que se merece. Pero ¿qué merece cada uno?
- Dar a cada uno lo que le conviene o lo que necesita (y exigirle lo que pueda dar). Pero ¿qué necesita cada uno? ¿Lo que él cree que necesita? Y ¿por qué otros tienen que dar a uno lo que uno no es capaz de conseguir?
Hay algunas teorías que dicen de forma algo más precisa qué es lo justo:
A) La Justicia es la Fuerza.
Por naturaleza todo ser intenta conseguir el máximo poder sobre el medio para realizar sus propios deseos.
Lo justo es que el león más fuerte domine toda la manada y cubra a todas las hembras, que mate a la gacela, etc. Gracias a este sistema la naturaleza se va haciendo más selectiva y sobreviven los mejores.Igualmente, entre los humanos es siempre la fuerza la que decide lo que debe considerarse justo. Los que dominan en cada momento imponen a los demás sus creencias y las leyes.
Es justo que EEUU tenga armas nucleares y no las tenga Irán sólo porque EEUU tiene la fuerza para decidirlo así. Es justo que unos ciudadanos tengan muchos más bienes que otros porque tienen más fuerza para conseguirlos y defenderlos. Y así con todo.
En fin, LO JUSTO ES LO QUE DECIDE EL MÁS FUERTE.
B) La justicia es un pacto.
Por naturaleza todos creemos que ES PEOR SUFRIR UN MAL QUE COMETERLO. Pero como
nadie tiene la fuerza suficiente para prevalecer sobre todos los demás, sino que está obligado, por naturaleza, a convivir y hasta a colaborar, si quiere sobrevivir y vivir mejor; y como, además, los beneficios que se sacarían de una sociedad sin leyes serían para todos inferiores a los perjuicios que se derivarían de dicha situación, todos creemos que es mejor respetar unas leyes, o sea, perder cierta libertad y sacrificar ciertos deseos, a cambio de seguridad y colaboración para conseguir otros mayores. Pero la justicia no es un fin en sí, sino un medio para nuestros deseos.Platón rechaza ambas teorías, la de la fuerza y la del contrato. ¿Por qué? ¿Cuál es su propuesta?
Para pensar en ello, además de recordar cuál es su teoría de lo que es un hombre, intentemos
contestar a estas preguntas:Supongamos que alguien tuviese un arma que le hiciese invulnerable y superpoderoso. ¿Respetaría este individuo las leyes? ¿Por qué?
¿Qué te parece peor, torturar tú a alguien o que alguien te torture?
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¡Hola, soy anonimaII!
ResponderEliminarA mi siempre me han dicho que cada uno tiene lo que se merece al final (tanto si ha actuado bien como si lo ha hecho mal) Pero me centro en la segunda parte, cuando una persona hace algo malo yo creo que no es porque no sepa lo que está haciendo sino porque no sabe las consecuencias que tendra y con esto me refiero que por ejemplo un asesino cuando mata puede que lo haga porque nunca ha estado en el caso en el que matan a alguien cercano a él y por tanto no ha sentido ese dolor. Pero cuando mata para vengarse de la muerte de alguien ¿que pasaría entonces? En este caso si que sabe lo que va a pasar y lo que van a sentir las personas cercanas porque al fin y al cabo el muerto estaría muerto pero ¿y las personas de su entorno?
En cuanto qué me parece peor: torturar o que me torturen... Sería una dificil decisión porque cuando te torturan sufriría porque en ese momento me sentiría indefensa y sin saber que hacer pero ¿torturar yo? y luego que hago con ese remordimiento en mi cabeza ¡no podría! creo que prefiero que me torturen y que tengan ellos ese cargo y además como diría mi abuela "ya tendrá esa persona lo que se merece" :)
Anónima, muchas gracias por tu participación.
ResponderEliminarSeguramente cada uno tiene al final lo que se merece (¿qué otra opción hay?).
El que se venga, sabe el dolor que causará, pero ¿sabe también que devolver mal por mal es rebajarse, hacerse uno mismo peor?
Saludos, y comenta cuando quieras.