-No des a la enseñanza una forma que les obligue a aprender por la fuerza.
-¿Por qué?
-Porque no hay ninguna disciplina que deba aprender el hombre libre por medio de la esclavitud. El alma no conserva ningún conocimiento que haya entrado en ella por la fuerza.
-Cierto.
-No emplees, pues, la fuerza, mi buen amigo, para instruir a los niños; que se eduquen jugando, y así podrás también conocer mejor para qué está dotado cada uno de ellos.
(Platón)

sábado, 12 de diciembre de 2009

Tomarse las cosas con filosofía

Cuando la gente dice “se ha tomado las cosas con filosofía”, quiere decir (quizás sin saberlo) “con filosofía estoica”, o con estoicismo.

La Naturaleza, según los principales filósofos estoicos (Zenón de Citio, Crisipo, Séneca...), es un único ser animado por un espíritu único, al que llaman Fuego y Logos, y que todo lo gobierna. Nuestras mentes son parte de ese logos único o Alma del Mundo, y nuestros cuerpos, parte de la naturaleza única. Todo lo que ocurre, ocurre por necesidad.

Sabio es aquel que comprende que lo único que está en su poder es no desear lo imposible, no identificarse con lo que no es verdaderamente uno (o sea, el placer, el dinero, la política… todo o casi todo). Así, permanece en paz y no teme la muerte. A esto es a lo que llaman algunos, hacer de la necesidad virtud, ‘amor fati’ (amor al destino) en latín. Para el sabio, como decía Sócrates, toda maldad es ignorancia, y la virtud es su propia recompensa (el que hace el bien no espera ganar nada más que hacer el bien).


Entre los muchos filósofos estoicos, griegos y romanos, hubo un emperador romano (Marco Aurelio -el de la foto-), un “español” (el cordobés, Séneca) y un esclavo cojo, Epicteto. De este último os copio algunas frases, para que os hagáis más sabios:

De las cosas que existen en el mundo, unas dependen de nosotros, otras no. De nosotros dependen nuestras opiniones, nuestros movimientos, nuestros deseos, nuestras inclinaciones, nuestras aversiones, en una palabra, todas nuestras acciones. Las cosas que no dependen de nosotros son: el cuerpo, los bienes, la reputación, la honra, en una palabra, todo lo que no es nuestra propia acción. Las cosas que dependen de nosotros son por naturaleza libres, nada puede detenerlas, ni obstaculizarlas; las que no dependen de nosotros son débiles, esclavas, dependientes, sujetas a mil obstáculos y a mil inconvenientes, y enteramente ajenas.
Recuerda pues que, si crees libres a las cosas por naturaleza esclavas, y tuyas a las que dependen de otro, encontrarás obstáculos a cada paso, estarás afligido, alterado, e increparas a Dios y a los hombres. En cambio si tienes por tuyo a lo que te pertenece, y, a lo ajeno como de otro, nunca, nadie, te forzará a hacer lo que no quieres ni te impedirá hacer lo que quieres. No increparás a nadie, ni acusarás a persona alguna; no harás ni la más pequeña cosa, que no desees; nadie, entonces, te hará mal alguno, y no tendrás enemigos, pues nada aceptarás que te sea perjudicial.

Lo que turba a los hombres no son las cosas, sino las opiniones que de ellas se hacen. Por ejemplo, la muerte no es algo terrible, pues, si lo fuera, a Sócrates le hubiera parecido terrible; por el contrario lo terrible es la opinión de que la muerte sea terrible.

No pidas que las cosas lleguen como tú las deseas, sino deséalas tal como lleguen, y prosperarás siempre.

Nunca digas respecto a nada “Lo he perdido”, sino “Lo he devuelto”. ¿Ha muerto tu hijo? Lo has devuelto. ¿Ha muerto tu mujer? La has devuelto. ¿Te han robado la tierra? También esto has restituido. “Pero, aquel que la ha tomado es un malvado” ¿Y a ti, que te importan las manos por las cuales aquel que te la ha dado a querido retirártela? Mientras Él te la deje, úsala como algo que no te pertenece, como los turistas disfrutan los hoteles.

Si quieres que tus hijos y tu mujer y tus amigos vivan siempre, estás loco; pues quieres que las cosas que no dependen de ti, dependan, y que lo ajeno, sea tuyo. Si quieres no frustrar tus deseos, tú puedes: sólo desear lo que depende de ti. El único Amo es el deseo. El verdadero amo de cada uno de nosotros es aquel que tiene el poder de darnos o no, quitarnos o no, lo que deseamos o no. Todo hombre entonces, que quiere ser libre, no desea y no rechaza nada que dependa de otros, de lo contrario, necesariamente será esclavo.

Recuerda que debes conducirte en la vida como en un banquete. ¿Un plato ha llegado hasta ti? Extiende tu mano sin ambición, tómalo con modestia. ¿Se aleja? No lo retengas. ¿No ha llegado aún? No lances desde lejos tu deseo, sino que espera a que el plato esté a tu lado. Pórtate así con los amigos, con una mujer, con los cargos y las dignidades, con las riquezas, y serás digno de ser admitido en la mesa de los dioses.

Acuérdate que eres actor en una obra teatral, larga o corta, en que el autor ha querido hacerte entrar. Si él quiere que hagas el papel de un mendigo, es preciso que lo hagas tan bien como te sea posible.

Cuando alguien te maltrate o hable mal de ti, convéncete de que él se cree obligado a ello. No es entonces posible que él se ajuste a lo que a ti te parece. Si te sirves bien de esta regla, soportarás pacientemente a quienes de ti mal hable; pues a cada injuria, no dejarás de decir: “él cree tener razón”.

No te llames filósofo, ni hables bellas máximas ante los profanos; sino haz lo que tales máximas prescriben.

Actitud y manera de ser del no filósofo: Él no espera nunca de sí mismo su provecho o perjuicio, sino siempre de los otros.
Actitud y manera de ser del filósofo: Él no espera sino de sí mismo, tanto su provecho como su perjuicio.
Algunas señales del que progresa en el estudio de la sabiduría: a nadie censura, a nadie alaba, no se queja de nadie, y no acusa a nadie, no habla de sí como si él fuera o supiera algo.
Tiene hacia todas las cosas sólo movimientos amables y dulces. Si se le trata de simple e ignorante, no se apena. En una palabra, está siempre en guardia contra sí mismo como contra un hombre que le tiende continuamente trampas y que es su peor enemigo.

¿Qué te parece? ¿Esto de tomarse a bien las cosas como vienen, es la mayor sabiduría?

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